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Durante los días 10 y 11 de junio, un grupo de hermanas de la Provincia "Ntra. Sra. de las Mercedes" nos hemos reunido en Cájar respondiendo a la invitación de formación realizada por el Gobierno Provincial. El tema era sugerente: profundizar en la Carta Testamento que el P. Zegrí escribió a la Congregación en 1896; y la ponente no lo era menos, Sor Pilar Villegas Calvo, entusiasta e investigadora donde las haya de la vida del P. Zegrí.
Como ella nos indicaba, caminamos hacia la celebración de un jubileo: los ochocientos años de fundación de la Orden de la Merced. Ante dicho acontecimiento, se nos ha invitado a profundizar en la figura de Jesucristo Redentor, y concretamente ahora, en la figura del P. Zegrí asociado a la obra redentora. Lo hemos hecho principalmente fundamentándonos y dejándonos acompañar por la carta-testamento que él escribió para la Congregación.
Así como el P. Zegrí es asociado a la figura de Jesucristo Redentor, él mismo asocia su fundación a la Orden de la Merced, por lo cual en este gesto estaba realizando su propia inserción en el carisma mercedario.
De la lectura y reflexión de la carta del P. Zegrí se han podido deducir varias cosas, de manera general:
Encontramos a un P. Zegrí…
- Muy humano, cuyas reacciones son bastante normales.
- En quien nos podemos ver reflejadas, porque cualquiera de nosotras se hubiera defendido ante una situación injusta.
- Se enfada, y bastante, ante la mentira y el desprestigio.
- Se va serenando a lo largo del discurso.
- Él mismo aprende de las circunstancias y termina aconsejando a las hermanas.
- A pesar de toda su humanidad, sabe reconocer la intervención de Dios en los acontecimientos. Hace una lectura creyente de los mismos. Esto es lo que santifica su vida, no tanto el haber fundado una Congregación, como él afirma.
- Al término de la trayectoria, descubre la auténtica verdad: "Dios".
Agradecemos profundamente a nuestra hermana Pilar, su entusiasmo, su trabajo, su esfuerzo y su sabiduría al ponernos en contacto con la vida del Padre Zegrí, reflexionando e intentando ayudarnos a aplicar a nuestra propia vida las enseñanzas recibidas de nuestro Santo Fundador.
