La comunidad intercongregacional mercedaria, comparte
Damos infinitas gracias a Dios, a nuestra Santísima Madre de las Mercedes y a nuestras Congregaciones, que nos han enviado a esta misión, en la que estamos desde el 01 de marzo del 2016, para ser portadoras de la merced y la ternura de Dios, a nuestros hermanos cubanos. Gracias a nuestras hermanas de los Gobiernos generales, y a toda la familia mercedaria, que ha confiado en nosotras para sembrar semillas de Reino en esta realidad que sufre especialmente la falta de libertad, y está necesitada de esperanza y de soñar con nuevos horizontes que hablen de humanidad y de evangelio.
Podemos decir que ya nos tocó el día del nacimiento, porque hemos cumplido 9 meses de presencia en estas tierras, y dentro del proceso que llevamos, hemos ido conociendo mejor la realidad cubana.
Después de un tiempo de asentamiento en la casa parroquial de Guáimaro, a partir del 01 de noviembre, hemos visto oportuno y conveniente, trasladarnos temporalmente a la casa parroquial de la Parroquia Virgen de la Caridad, en el Municipio de Elia, a 12 Km. de Guáimaro, mientras se realizan los trabajos de remodelación de la vivienda destinada a la comunidad misionera.
Se viven muchas limitaciones y carencias de recursos básicos, y sin embargo, se comprueba con fuerza la experiencia del Dios Providente, que no abandona a sus hijos e hijas y que nos anima y fortalece para continuar viviendo esta misión con entrega y entusiasmo.
En medio de este contexto sufriente, descubrimos corazones que palpitan con una gran riqueza humana de acogida, alegría y sencillez, solidaridad y sed de Dios.
Nuestro deseo es seguir irradiando esperanza, cercanía, escucha, misericordia, alegría y sencillez, que son los gestos a través de los cuales, comunicamos nuestra experiencia carismática y ellos pueden descubrir al Dios que les ama, libera y nunca abandona.
Servicios pastorales que estamos realizando:
En estos meses de compartir la vida y la misión evangelizadora en la diócesis de Camagüey, hemos contemplado parte de la realidad de nuestro pueblo y de nuestra gente y hemos escuchado las interpelaciones que nos hace Dios. Esperamos ir respondiendo a estas llamadas, de forma más concreta, en nuestras pastorales, con la confianza siempre puesta en Dios, que nos conduce.
Aunque fuimos destinadas a la parroquia de Guáimaro, por las necesidades pastorales y la falta de sacerdotes, nuestra labor evangelizadora la estamos realizando en tres zonas.
En la parroquia de Guáimaro, la hermana Fabiola Jakiwara, mercedaria de la caridad, está colaborando en el asesoramiento y la formación del grupo juvenil, con los encuentros de formación de los matrimonios, y en el área de la catequesis de Bautismo y Primera Comunión. A su vez, visita y acompaña los pueblos de la parroquia de Guáimaro: Cascorro, Caimito, Pueblo Nuevo, Palo Seco, con las celebraciones de la Palabra, y con la catequesis sacramental, a las personas que lo solicitan: niños, jóvenes, adultos, matrimonios.
La hna. Ivanilde Rodrigues, mercedaria misionera de Brasil, se encuentra colaborando con la pastoral de la tercera edad y las visitas a las familias y a los enfermos.
La hna. Ramona Aguilar, mercedaria del niño Jesús, de Argentina, está colaborando dentro del área de Liturgia con el asesoramiento de las ministras de la Eucaristía. Colabora temporalmente en el servicio de sacristía y secretaría de la Parroquia.
En la parroquia de Elia, la hermana Ramona Aguilar realiza la visita a los enfermos, a los ancianos. También visita los pueblos: La Jía, Las Gordas, Leningrado, Berrocal y Ana Caona, en los que, junto a los misioneros/as laicos/as, realizan la celebración de la Palabra y catequesis a niños. Del mismo modo, las hermanas Fabiola e Ivanilde visitan a las familias y los enfermos, brindando apoyo espiritual y cercanía fraterna.
La hna. Ivanilde ha iniciado su colaboración en la asesoría de la Catequesis de Bautismo y Primera Comunión de la parroquia. Acompaña y anima la adoración al Santísimo y Eucaristía, una vez por semana.
En la zona de Amancio, colabora con las visitas a los enfermos y familias. Atiende periódicamente los pueblos de Guayabal y El Indio, en los que realiza visitas familiares y celebración de la Palabra.
Como pueden notar, nuestra labor consiste básicamente, en acompañar de forma cercana a las familias, a los enfermos y a las comunidades cristianas, en los pueblos que atienden las parroquias, colaborando con la labor de los misioneros, misioneras y catequistas, que es una labor admirable, de entrega y perseverancia, pese a la avanzada edad, de la mayoría de ellos.
Del mismo modo, la formación y acompañamiento de los grupos de la parroquia: pastoral de adolescentes y jóvenes, matrimonios, catequesis sacramental, pastoral de la salud, pastoral de la tercera edad.
El párroco, junto con los distintos miembros de los grupos de la comunidad parroquial, valoran y agradecen profundamente la presencia de las hermanas y la colaboración activa, cercana y entusiasta que estamos realizando en las distintas áreas pastorales, en las zonas que atendemos. Percibimos, por nuestra parte, mucha acogida hacia nosotras, y significamos para ellos, según nos expresan, una presencia que les anima, fortalece y acompaña en su camino de fe y de compromiso cristiano.
¡Gracias de corazón, a nuestras hermanas de Congregación, y a toda la familia mercedaria, por su oración perseverante y comprometida por este proyecto de Evangelio!
(Enviado por Hermana Fabiola, mc) VER MÀS FOTOS AQUI.........GALERIA FLYCK