Los hermanos mercedarios de la caridad (www.mercedariosdelacaridad.org) son una nueva primavera para nuestra Congregación. Ellos, entroncados en nuestra misma raíz carismática, enriquecen nuestra vida, vocación y misión al servicio de los más pobres y humildes.

hermanosmerced

 

Es una iniciativa que surgió de la acción del Espíritu en los corazones de muchos jóvenes que, al contacto con nuestras hermanas en la pastoral juvenil vocacional, quisieron ver al Señor y preguntaron: MAESTRO ¡DONDE VIVES? (Jn 1,38). Jesús, a través de ellas, les dijo: VENID Y LO VEREIS (Jn 1,38). Fueron… vieron… y se quedaron…

Se quedaron fascinados por un Jesús que, a través de las mercedarias de la caridad, mujeres en camino con los esclavos del mundo y solidarias con ellos, rompía cadenas de esclavitud y liberaba a los seres humanos.

Iniciaron así una andadura que:

  • fue iniciativa del Espíritu… Hasta entonces, nadie en la Congregación nos habíamos planteado la posibilidad de la rama masculina
  • fue solicitada desde el corazón del pueblo, de la historia, de los mismos jóvenes…

 


Y la Congregación, sabedora de que Dios actúa en las mediaciones de la historia, que el don del carisma no es propiedad privada y que se nos otorgó para bien y edificación de la Iglesia, y respondiendo a los signos de los tiempos…

¡LA CONGREGACIÓN LES ABRIO PUERTAS Y VENTANAS!

Hoy hacemos camino juntos. Bebemos en las mismas fuentes y tenemos la misma inspiración carismática.

JOVEN… Si quieres hacer experiencia con ellos, están dispuestos a dejarte entrar por sus puertas:

  • sencillas, para los sencillos
  • abiertas, para los que buscan
  • selladas, para los que tienen deseos de alianza
  • libres, para los que buscan libertad
  • fuertes, para los que desean vivir la fe como respuesta de vida
  • solidarias, para los que buscan proyectos de encarnación en el dolor de la humanidad
  • íntimas, para los que desean recrearse en el fuego de la oración
  • fraternas, para los que buscan compartir a todos los niveles…

 

VEN Y HAZ EXPERIENCIA CON ELLOS, ¡NO TE ARREPENTIRAS!